Vuelta a la realidad

Diversos estudios apuntan que la gente engorda una media de 2-3 kilos durante el verano. Esto no sólo se debe a los excesos cometidos durante el mismo, sino a las ganas que ponemos en primavera para llegar con mejor aspecto al verano, y tirarlo todo por la borda en cuanto empiezan las vacaciones.

Una pérdida de peso conlleva un mantenimiento para evitar los temidos “efectos rebote”, por lo que ¿por qué no empezar ya mismo a cuidarnos en vez de esperar a primavera?”. No sólo perderás lo que hayas cogido en verano, si es tu caso, si no que ya te estarás preparando para el siguiente, sin prisas y con salud. Si lo haces así verás como relajarte el siguiente verano no te pasa tanta factura.

No hace falta que empecemos a lo bruto, pero si con algo de ganas. Si eres de los que sufren enormemente con la “vuelta a la realidad”, puedes comenzar por cuidarte entre semana y relajarte los sábados y domingos. Aprovéchate de la variedad de frutas y verduras que todavía en septiembre nos acompañan y apetecen, y acuérdate de ordenar tu alimentación en 5 comidas diarias (desayuno, media mañana, comida, merienda y cena). Muchos verán que sólo con esto, la sensación de hinchazón que tanto comentáis desaparece en muy poco tiempo.

Otra parte fundamental es retomar una rutina de ejercicio, volver a los paseos u otros deportes al aire libre, ahora que el clima resulta muchísimo más agradable. Sin darte cuenta estarás contribuyendo no solo a la salud y cuidados de tu cuerpo, sino también a los de tu mente, haciendo que la “vuelta a la realidad” sea muchísimo más llevadera.